por Gisela Dohm*

 

Recientemente se estrenó la serie División Palermo, una producción argentina dirigida por Santiago Korovsky que, conjugando humor irónico y corriendo constantemente el límite de lo políticamente correcto, nos invita a pensar en la diversidad e inclusión desde un lugar ingenioso. La trama comienza con el armado de una guardia urbana que busca cambiar el rostro o la imagen de las fuerzas de seguridad (con rasgos autoritarios y racistas) convocando a personas pertenecientes a “minorías” discriminadas. Lo interesante de la propuesta es que, desde la comedia,  vemos que se convocan a personas con discapacidad, migrantes, mujeres trans, personas judías, de talla baja, todas para formar parte de una guardia civil que cumpla con una puesta marketinera de “diversidad e inclusión” que permita mejorar la imagen de la institución. 

Esta es una invitación a pensar cuánto de estas estrategias son utilizadas por las organizaciones cuando implementan acciones para “venderse inclusivas”. Se buscan personas para cumplir con “cupos” sin tener ninguna estrategia real y comprometida de inclusión, lo que supone el riesgo de que se sientan usadas, menospreciadas, o se exacerben tensiones internas en los lugares de trabajo. Y no estamos en contra de las acciones afirmativas, pero si de si solo se hacen para hacer el check list, pero no para un cambio cultural. 

Muchas veces estas medidas no están en el marco de un Plan o Programa que expliqué el  por qué de ellas. Además, como estrategia de marketing resulta  una sábana corta de promoción maquillada de diversidad, equidad e inclusión (DEI) y suele traer rápidamente una mala reputación para las organizaciones. 

Para trabajar en DEI no alcanza con tener una persona de cada “minoría”, sino pensar en una estrategia transversal donde se busque potenciar las miradas y experiencias vitales para abonar a una construcción plural y colectiva. Para esto, la diversidad debe entenderse como una herramienta a gestionar. ¿Cómo? A través de un plan organizacional, con formación en liderazgo inclusivos, con políticas y acciones que la direccionen y la promuevan.  

Para ello, es imprescindible comprender que esto supone una inversión que aporta mejores rendimientos en términos de innovación, creatividad, valor agregado y riqueza de miradas.  

Te invitamos a que sumes la mirada de DEI los 365 días del año. Si quieres saber cómo, puedes escribirnos a info@nodosconsultora.com

*Consultora Asociada de Nodos

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